De religioso a delincuente, hoy Adrián Pérez pretende ser Edil de Santa Lucía del Camino.

Óscar Rodríguez

Adrián Pérez, candidato por el partido Fuerza por México, es una persona con poca credibilidad y sin ética en Santa Lucía del Camino; ya que en su historia fue pastor y le seguían sus feligreses; sin embargo, sostuvo relación amorosa con una mujer casada de su capilla; lo que derivó un escándalo por parte del esposo quien lo obligó a cerrar y retirarse de su celibato.
Sin embargo, Adrián Pérez estuvo preso por el delito de despojo en contra de una pareja de adultos mayores, qué mediante engaños y mentiras logró su cometido. Estos hechos sucedieron en el año 2013, cuando la Agencia Estatal de Investigación (AEI)lo detuvo y lo ingresó a los separos de la Penitenciaria de Ixcotel por el delito de despojo en contra de María Agustín Cruz. Otro delito que fue acusado es el de fraude junto a Felipe de Jesús Valdivieso Tenorio y Vicente Díaz Martínez en contra de Marcial Pinacho Ramírez, esto se encuentra en la averiguación previa 320/TLC/2010.
De discreto no tiene nada y lo comprueba ya que se la pasa diciendo a la ciudadanía que compró a la dirigente del partido Fuerza México, Salomé Martínez, a quien le entregó la cantidad de 500 mil pesos por su candidatura y con los cuáles logro bajar a Víctor Ortiz Tello, precandidato quien deposito la confianza en ese partido y quien había realizado todo un proceso de organización en Santa Lucia; imagínense, y es como dice el dicho nadie sabe para quien trabaja, y en esta ocasión a Ortiz Tello le tocó la de perder.
El partido que vio nacer a Adrián Pérez Rojas fue el Partido Encuentro Social (PES), posteriormente y con el efecto MORENA, supuestamente fue militante; sin embargo, la dirigencia Nacional y Estatal no los pudo engañar y por ello no lo incluyeron en la encuesta de dicho partido. Enojado y como todo un “Chapulín” saltó a Fuerza por México; esto corrobora que es un ser sin convicción política y sin prejuicio familiar, ya que debemos recordar que cambio a su esposa e hijos por su secretaria, abandonándolos.
Un acto de corrupción es aceptar un puesto por el cual no está capacitado y siendo regidor gana la cantidad de 100 mil pesos mensuales, por ello, hace unos días no quería dejar el puesto; pues es un buen dinero, pero sin tener productividad, es dinero mal ganado. Así que debemos cuidar por quien se vota.